«La fête de l’insignifiance». Ese es el título de la nueva novela de Milan Kundera. Y yo que ya no puedo esperar a que salga en español lo he comprado así, en francés, y ya de paso practico un poco (el idioma, no seáis mal pensados). Espero tenerlo muy pronto en mi haber.
Kundera es un autor de los que te encantan o no puedes ni verlos en el escaparate. En mi caso me declaro una seguidora absoluta de su obra, y aunque aún me quedan algunos de sus libros en la estantería pendientes de leer, confieso que estoy obsesionada por leer su nueva obra y compararla con «La Broma», su primera novela, que estoy leyendo en estos momentos y que estoy disfrutando como suelo hacer cada vez que decido dedicarme a la lectura de este autor.
Me pregunto qué nos deparará este nuevo libro, si me dejará reflexiones a cada página que paso, si me quedaré con la sensación de aturdimiento que me han dejado otros de sus títulos para luego no poder dejar de pensar una y otra vez en éste o aquel pasaje y en sus varias interpretaciones.
Y sobre todo tengo ganas de una buena dosis de inspiración, de esas que tardan en desaparecer y que provocan el síndrome de los dedos inquietos. Y por supuesto, esta vez espero aprovecharla para dar forma a un par de ideas que llevan meses rondando mi cabeza.
Éstas son mis expectativas. ¿cuáles son las tuyas?
A.